A Federico lo matarón los hombres,
Los hombres sin nombre,
Que no entienden de ideas,
Que no saben de Lorca.
Sin ser lo que matan,
Los asesinos ciegos de patria,
De nombres mariposas,
De Poetas que no hay.
Hoy nacen las flores y las alas
y con ellas mariposas.
Y guarda la dictadura,
sociales insectos armados
y siempre governantes.
Que no entienden que al nacer
No has de morir,
Como quiera un Rey.
En la luz, de noche,
un grito iluminó tanto,
Como un giro, que da el día,
cuando te lo quitan.
Aunque cargen con el chopo,
Y le corten la cabeza,
Las estrellas ya no pueden brillar sin sus ojos,
Cien años de vida canta la sabina,
Y el tío vivo de la feria,
Ya no puede girar y girar,
Hasta llegar a Dios,
Sin su poeta niño.
A Federico lo mató el mal vivir,
de las malas lenguas.
Los celos de la ingnorancia.
Qué no saben existir,
Qué no entienden de vida,
Qué no existe en política,
Qué la vida és poesía.
Ya te veo Federico,
Ya te veo venir,
En tu arcoiris,
Con tu paso franco,
Con tu traje blanco,
Ya te veo venir,
Vivo entre los muertos.
Con gracia en el camino,
Iluminado en metáfora,
Y me dices :
No es nada, mi niña
No es nada,niños somos,
Somos todos.